Noche de frío.

martes, 19 de octubre de 2010

Noche de frío.


Un cura y una monja estaban en un refugio, solos. En el refugio había una cama,
una bolsa de dormir y un montón de mantas.

El cura, un caballero, le dice a la monja que duerma en la cama, y que él se tira 
en el suelo. 

Se mete en la bolsa de dormir, sube el cierre hasta arriba, y se dispone a dormir. 
En eso, la monja exclama:

- Padre, tengo frío.

Entonces, el cura baja el cierre de la bolsa, agarra una manta, se la coloca arriba 
de la cama, se mete dentro de la bolsa de dormir, y sube el cierre hasta arriba 
de todo. Cuando cierra los ojos la monja le dice:

- Padre tengo mucho frío.

El cura baja nuevamente el cierre, sale de la bolsa de dormir, agarra otra manta, 
se la coloca arriba de la otra, y nuevamente se mete en la bolsa, sube el cierre 
hasta arriba, y cierra los ojos para dormir. 

Nuevamente se escucha la voz de la monja que le dice:

- Padre, ¡¡estoy congelada!!.

- Hermana, - contesta el padre - ya que estamos solos, lejos de la civilización, 
¿usted tendría problemas en que hagamos como marido y mujer?.

La hermana con voz coqueta le dice que no, a lo que el cura responde:

- Entonces levántate, anda a buscar la manta, ¡¡¡y no me rompas más las pelotas!!!